miércoles, 30 de enero de 2013

El Mito del Mesías II: Las Primeras Religiones

A medida que la sociedad va evolucionando y volviéndose más compleja, sus creencias lo hacen igualmente desarrollando nuevos Dioses que cubren nuevas necesidades existenciales a sus creyentes. Las Primeras Grandes Civilizaciones se van desarrollando en torno a Mar Mediterráneo, la mítica Tartesos precisamente enclavada en la Península Ibérica hacia el Sur, igualmente al otro extremo Mesopotamia o Sumer, de donde beberán su tradición Judea y que al día de hoy en sus contornos no dejan de descubrirse ciudadelas cada vez más antiguas. Pero si hay una de estas primeras grandes civilizaciones conocida por todo el Mundo, a nivel mediático es sin duda Egipto.

En estas primeras civilizaciones se comienza a estructurar un estamento religioso donde el chamán o brujo deja paso a la persona del sacerdote (aunque no terminen de desaparecer, si se mantienen al margen de las nuevas tendencias religiosas), el sacerdote es nexo de contacto entre los Dioses (más elaborados y de apariencia cada vez más humanizada tanto en lo físico, como lo emocional), y el hombre, rindiéndoles culto en “El Templo”, lugar que cobra más importancia que nunca. Por desgracia de igual manera, cada vez más, el Poder Político irá ligándose al Estamento Religioso usando este último como sistema de contención de la clase dominante sobre el pueblo, como se ve a lo largo de la historia. Entre estos panteones de Dioses comienza a aparecer un nuevo icono o personaje que se vincula con la humanidad, convirtiéndose en su defensor y salvaguarda.

Así por ejemplo tenemos a Dumuzi-Tammuz de Súmer Babilonia o a Innana-Ishtar de Mesopotamia, que murieron y resucitaron después.

Egipto (junto a Mesopotamia) es la cuna de la tradición judeo-cristiana, a la que viajaron o de la que salieron Abraham, José, Moisés y Jesús. Allí encontramos las semillas de nuestros símbolos y creencias fundamentales, como la cruz ansata, el Dios Osiris asesinado y resucitado, o Isis amamantando a Horus como luego lo haría María con Jesús. Los grandes hombres de Grecia tuvieron maestros egipcios  y de ellos tomaron la sabiduría con la cual parieron la civilización occidental. También están allí las raíces del esoterismo y la alquimia (termino derivado del nombre demótico de Egipto, Kmi), su bandera reúne los colores de la Gran Obra Alquímica, oscuridad (migrado), combate, (rubedo) y triunfo (albedo), en su centro un halcón dorado, rememorando el vuelo del iniciado trasmutado en oro, símbolo de Horus, joven héroe guerrero e iniciado, que ha triunfado sobre Seth, el malévolo rey del Caos. Los textos herméticos señalan que “Egipto es una imagen del cielo, el templo del Cosmos en su conjunto” y añaden “como es arriba es abajo, como es dentro es fuera”.

Curioso es el caso de la venida de Osiris que es anunciada por tres sabios identificados con las tres estrellas principales de cinturón de Orión (Alnitak, Alnilam y Mintaka) que apuntan a Sirio (Osiris). Sería despedazado por su traicionero hermano Seth para ser recompuesto y resucitado por Isis.

Horus nació en una cueva, de madre virgen (Isis-Meri, proclamada por los egipcios “Reina del Cielo” y ataviada con un manto azul adornado de estrellas), en el solsticio de invierno (celebrado también en 25 de Diciembre), siendo su alumbramiento anunciado por una estrella, recibió adoración de tres hombres sabios, asistió al templo a los 12 años, caminó sobre las aguas, hacía milagros curativos, se le representó crucificado en algunas tradiciones, resucitó al tercer día siendo considerado salvador de la humanidad. Algunos estudiosos sostienen, que los evangelios fueron compuestos por eruditos sacerdotes judeo-egipcios del templo de Serapis en Sakkara (La Vanguardia 25/12/2001), en textos egipcios del 1000 A.C. como “La Oración del Ciego”, ya encuentran precedentes del Padre Nuestro y las Bienaventuranzas.

Otro que será también muy relevante y seguido en su época por numerosas personas (además de influir también en la tradición Judeocristiana) es Sösyans nacido de virgen, será (ya que se espera su llegada) un gran Rey (que no Dios) que impondrá la justicia cuando el Mundo parezca perdido según la religión de Zoroastro (Zaratustra, el hombre de los camellos viejos), el Zoroastrismo, es una religión surgida en la meseta Iraní en el II milenio A.C. siendo su libro sagrado el “Avesta”, podemos leer en él, “Abrió la boca y habló en presencia de sus discípulos […] Quiero revelaros un misterio prodigioso que se refiere al Gran Rey que ha de venir al mundo, Al final de los tiempos, cuando se acerque la disolución final, un Niño será concebido y sus miembros de formarán en el vientre de una virgen, aunque ningún hombre se habrá acercado a ella […] Cuando se acerque el comienzo de su llegada grandes señales aparecerán en el cielo. Aparecerá una estrella brillante en medio del cielo, cuya luz será más grande que la del Sol”. Zoroastro nacido el 25 de diciembre de Virgen, bautizado en un río, es hacedor de milagros y tentado por demonios, por su sabiduría se le denominó “la palabra hecha carne”.

Attis (Divinidad de Frigia) nace de Cibeles (Nana), doble divinidad (padre e hijo divino), crucificado en un árbol para salvar a la humanidad, su muerte fue expiatoria, resucitará al 3º día encontrando los sacerdotes su tumba vacía el 25 de Marzo, sus seguidores se bautizaban y comían pan y vino como cuerpo y sangre Divinos.

Adonis de Mirra (Dios Sirio), será venerado en una cueva ubicada en un bosque donde más tarde se situó Belén.

Apolo o Hermes (Hombres Dioses), nacieron ambos en una cueva, elemento de gran carga mítica al simbolizar el útero de la Madre Tierra.

Asclepio al igual que Apolonio de Tiana (según su biógrafo Filóstrato) efectuaban exorcismos y sorprendentes milagros.

Grecia será otra de las grandes cunas de la civilización en Europa, también bañada por le Mediterráneo, el desarrollo de de su cultura es básico para lo que vino después, la Democracia, el desarrollo filosófico, matemático y de otras artes, así como el proclive contacto con otras culturas enriquecerá sobremanera entre otras cosas su panteón mitológico. Los Cultos mistéricos del mundo griego, surgieron alrededor del siglo IV A.C. y quizás tengan su origen en los que se practicaban en Creta. Dichos cultos, sobre todo los llamados dionisiacos y eleusinos, constituyen las últimas reminiscencias en Occidente del uso de plantas alucinógenas para rasgar el velo de la realidad.

Orfeo y Dionisio de Zagreo, Tracia o Adonis, Biblos y Kore en Grecia so ejemplos de dioses resucitadores. Dionisio, Dios griego hijo de Zeus y la mortal Semede, nació dos veces, es el Dios de la intoxicación, capaz de llevar a las mujeres a la locura más absoluta. Un dios de la vegetación, loco y agonizante, un Dios de la orgía, lo andrógino, Dios del vino, símbolo de la sangre y de la vida, cuyo nacimiento estuvo rodeado de una gran luz, fue adorado en un pesebre, cuya cuna es transportada por un asno y que terminaría siendo crucificado, tiene por ejemplo, un episodio parecido a las bodas de Caná en su mito, además de ser considerado salvador e Hijo de Dios, resucitar al tercer día y ascender a los cielos, realizándose en sus cultos rituales con pan y vino.

Heracles llamado “El Salvador” y “Príncipe de la Paz” muere en el equinoccio de primavera, es un semidiós, lo que le confiere una ligación más cercana con el hombre, híbrido de Dios y humana, tiene los poderes del primero, pero la clemencia y alma de la segunda, apiadándose del cruel destino de sus compatriotas humanos y revelándose en su favor contra los Dioses para beneficiarlos.

Sin duda, será Mitra, unas de las Diedades Solares más conocidas en esta época en el viejo continente, siendo adorado por los Grandes Imperios formados en este tiempo. Se dice que nació el 25 de Diciembre de una Virgen en una cueva (¿establo?) siendo adorado por unos pastores que le trajeron presentes, tubo 12 discípulos siendo conocido como El Salvador, El Redentor, El Cordero de Dios y El Hijo de Dios resucito de entre los muertos (acontecimiento celebrado por sus seguidores al comienzo de la primavera), estableció un bautismo de agua y unos banquetes sacramentales (usando pan, agua y vino que representaban la carne y sangre). Son suyas las palabras “Quien no coma de mi cuerpo ni beba de mi sangre, haciéndose uno conmigo y yo con él, no se salvará”, hay que saber en este caso que, la Teofágia (comerse a Dios), era una alegoría muy común en estas antiguas doctrinas mistéricas. La Basílica de San Pedro en el Vaticano está justamente en el lugar en que se erigía un Santuario a Mitra. El culto a Mitra coexistió  hasta el siglo IV con el Cristianismo.

Pero en otras partes del Europa, menos vinculadas con lo expuesto hasta ahora las tradiciones siguen su propio camino ¿o no?, Los Celtas recibían un nombre provisional al nacer hasta que realizaban alguna hazaña digna recibiendo entonces su nombre definitivo en virtud de tal acto, siendo bautizado. Más al norte, Frey que es hijo de Odín y Friga (Virgen), resucitará también tras morir.

En Otras partes del Mundo “conocido”, nos encontramos más tradiciones por el estilo. Buda (siglo V-IV A. C.) fue anunciado por señales celestes y adorado por ángeles, su madre virgen, Maya, fue penetrada por un rayo divino concibiéndole.

En Oriente los panteones de los Dioses no tienen nada que envidiar a los del “Viejo Mundo”, tanto en China como en India (y territorios adyacentes) destacan por su gran número y variedad de expresiones filosofo-religiosas, aunque serán sobretodo sus corriente filosóficas las que encaminadas hacia otra vertientes, terminarán siglos posteriores llegando a Occidente con gran aceptación.

El 21 de Abril del año 753 A.C. se funda de Roma por Rómulo, para, poco a poco convertirse en el mayor Imperio hasta ese día. Siglos cruentos de guerras constantes y tratados continuos que aunque eliminaran mucha tradición y conocimiento de sus enemigos que no será recuperado hasta siglos posteriores por arqueólogos, también permitirá por otro lado el flujo de ideas que dará lugar a nuestra cultura.

En la zona de Jueda y Palestina, tras siglo de cruentas Guerras y diversos éxodos totales o parciales, los Judios se han asentado formando también una nación fuerte que mantiene una estructura política y religiosa en torno a sus creencias, donde la ley de Yahvé es seguida, como muestras sus escritos, porque cada vez que la han desobedecido el mal se cernido sobre ellos, pero cuando han vuelto al redil, una Salvador se a alzado de entre ellos para guiarlos (Abraham, José, Moisés..), no deja de ser curioso a modo de anécdota puntual, que siendo una religión monoteista si nos remontándonos al Génesis, nos encontramos con que el término “Elohim”, que NO quiere decir “Dios”, como suele traducirse, sino que es un nombre plural que viene a significar “fuertes” o “poderosos”, por lo que podemos decir que son varias identidades, quedando frases alteradas de la siguiente manera, “hagamos a nuestra imagen..”/ “He aquí que el hombre ha llegado a ser como uno nosotros, conociendo el bien y el mal”, mientras que “Yahvé” se traduciría como “El que és” y sería uno con los Elohim. Imperio Romano termina cerniendo su poderoso brazo sobre ellos, sometiéndolos, no sin la oposición de algunos sectores que pugnan por la liberación del yugo Romano esperando un salvador. En este contexto nace el que será recordado como Jesús, un judío de nacimiento que vivirá como judío y morirá como judío, de familia pudiente (que no rica), sus abuelos tienen rebaños y su padre es carpintero, pertenecer a un gremio son señal de estatus aunque no se pueda decir que pertenece a una familia rica u ostentosa, proclama una nueva doctrina de carácter, podría decirse que social, ejercerá probablemente de Rabí enfrentada a los abusos de un Poder Político-Religioso viciado por los dogmas e intereses, que olvida a los humildes favoreciendo a los poderosos y se contradice muchas veces con lo expresado en la Ley. Es un tiempo de “Milenarismo”, se espera el “Fin del Mundo” y Jesús va adquiriendo seguidores, aparte de sus apóstoles, convirtiéndose en un incordio para y un peligro de cara a un revuelta social que más que contra los Romanos atenta contra los intereses de los Poderes Judíos. Su fama pugnará no sólo con San Juan el Bautista (del que algunas corrientes piensan que son le mismo, por así decir, el antes y el después del bautismo Juan daría paso a Jesús ensalzado), cuyos seguidores terminarán emigrando hacia África pudiéndose encontrar sus vestigios incluso hoy en día. También habrá otros como Apolonio el Nazareno, iniciado que vivió en tiempo de Jesús llegando a ser más conocido incluso que este último, por lo que llegaron a decir de él que había mantenido pactos diabólicos, hasta se le construyeron templos siendo conocido hasta en Oriente. Finalmente será Jesús el que pase a la historia, aunque incluso hoy en día sea duda a nivel histórico su existencia, ya que apenas hay datos (registros, documentación oficial..), ni judíos, ni romanos, ni de otra índole fuera de la tradición, que respalde su existencia, cosas rara teniendo en cuenta lo relevante que se supone que fue, la poca atención que obtuvo de los cronistas e historiadores del momento, cuando reflejaron hechos de menor transcendencia. Su vida llega al final siendo crucificado por sus “delitos” muriendo (según la tradición) en lugar de Barrabás (De arameo Bar-(r)-abba (s) significa "El Hijo del Padre" siendo un especie de "desdoblamiento simbólico" de Jesús y no un personaje real), y a manos de Poncio Pilato (aunque serían los líderes religiosos judíos lo que habrían orquestado todo).



Y mientras, en el Nuevo Mundo, el echo de que no esté “oficialmente” descubierto, no merma su desarrollo cultural, tras haberse ido poblando, bien sea por el estrecho de Bering como se postuló en un principio o bien por migraciones navales (como postulan las nuevas corriente científicas) de sitios tan dispares como Asia, Oriente medio, Egipto o la costa Africana.

Los héroes gemelos, Hunahpú e Ixbalanqué, nacieron del encuentro entre Hun-Hunahpú y la doncella Ixquic, era dioses de los Mayas de Centroamérica, veneros por haber liberado al mundo de varios monstruos, entre ellos, los gigantes de la tierra son un ejemplo de lo que nos podemos encontrar junto al Dios Jaguar, La Serpiente Emplumada y otros. Así mismo es habitual las historias de Dioses u hombres sabios barbados que llegaron del mar trayendo conocimientos, cuando no es la propia población la que llegó desde el mar desde un lejano continente que normalmente colapsó bajo un cataclismo a pesar de las maravillas que consiguieron.

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